Pagos de Araiz, creada en 2000, se concibió como un proyecto único gestado alrededor de vivencias asociadas al mundo del vino
Moderna, especial, diferente del resto, creativa y sin complejos. Así era la bodega que la Familia Masaveu imaginaba cuando se decidió hace 15 años —el 10 de octubre del año 2000- a crear Pagos de Araiz con un objetivo claro: elaborar el mejor vino del mundo…
15 años después, la marca se ha convertido en un proyecto único, gestado alrededor de experiencias asociadas al mundo del vino gracias a la magia que se desprende de unas instalaciones vanguardistas de 14.000 metros cuadrados donde se trabaja sin escatimar medios humanos ni materiales para elaborar, como se ha dicho, el mejor vino posible y ponerlo al alcance de todos los bolsillos.
Un vino que surge a partir de una materia prima propia excelente proveniente de las 250 hectáreas de viñedos que rodean la bodega y la justa combinación entre los métodos tradicionales y la más avanzada tecnología manteniendo, siempre, el respeto por el medio ambiente tanto en los viñedos como en la bodega.
Un vino que cumple 15 años conquistando los paladares de exigentes consumidores y expertos catadores, y cosechando reconocimientos que animan a la bodega a continuar mejorando día a día y por supuesto, a seguir cumpliendo años.
¡Muchas felicidades!